26.5.08

Canciones: Mi calle (Lone Star)

Una cancionaca (para cantarla, incluso, en un puerto de barcos de recreo).


vivo en un lugar dónde no llega la luz. niños se ven, que van descalzos sin salud. por la estrecha calle algún carro viene y va, y cuando llueve nadie puede caminar. mi calle tiene un oscuro bar, húmedas paredes, pero sé que alguna vez cambiará mi suerte. doy mi dirección al que brindo mi amistad, mas al saberla no me quieren visitar. pero alguna vez siempre por casualidad he visto amigos con mujeres en el bar. mi calle tiene un oscuro bar, húmedas paredes, pero sé que alguna vez cambiará mi suerte.

25.5.08

Fiestas El Alternador '08 (I)



Este fin de semana se ha puesto en marcha "oficialmente" la IV edición del Festival El Alternador.

El viernes, en la Fnac de Sevilla, los miembros de la Asociación Musical Stone Car, acompañados de algunos cargos públicos del Ayuntamiento de Montellano, presentaron en sociedad el cartel de la edición de este año (que será el 4 y 5 de Julio), diseñado por Alejandro Masferrer, y que contará con la presencia de, entre otros, José I. Lapido, Tarik y la Fábrica de Colores, Aroah, G.A.S. Drummers, Midi Puro o Blacanova. Y todo ello, gratuito. Además, tras la presentación, se pudo presenciar (y disfrutar) la actuación acústica de Francisco Nixon (Fran Fernández acompañado de Ricardo Vicente), en la que tocaron temas propios de su primer disco "Es Perfecta", algunos de los clásicos de La Costa Brava ("El cumpleaños de Ronaldo", "Treinta y tres", "Déjese querer por una loca", entre otras) y alguno de Richi (ver vídeo interpretando "Reactor nº 4"). Derrochando cercanía y sensibilidad. Muy grandes.

Al día siguiente, el sábado, tuvo lugar la segunda fiesta en el Bar Latino de Utrera, local muy recomendable, con una selecta decoración y gusto musical. Abrieron (y con la merecida fama de directo adictivo y rabioso) los sevillanos The News, que fueron desgranando su repertorio de rock duro de guitarras que destila referentes, dónde destaca una brillante sección rítmica y la estudiada puesta en escena de su cantante, todo un frontman que no se limita a cantar o tocar, sino que vive intensamente la música, animando a la participación de los presentes y contagiando de sus ganas sobre el escenario (y en ocasiones, mezclándose entre el mismo público). Con sobrada actitud, potencia y energía animaron al respetable que llenó la sala con sus, ya conocidos, temas “Everybody Knows But Nobody Says”, “In The End” o “Can You Get Over Your Deep Sex Addiction?”, entre otros. Tras ellos, con una breve pausa, se pudo disfrutar de las sesiones a los platos de dj Timebox y dj Oldstyle, que trasladaron el Latino cuatro décadas atrás, al corazón de los sesenta y primeros setenta, e hicieron bailar a los presentes hasta altas horas.

Y por si fuera poco, la semana que viene más:
Vier. 30 Mayo Arriate (Málaga). Sala Los Caireles 20.00 hrs.
Mañana + dj Chef Kiko

Sáb. 31 Mayo Jerez. Bar Javrok 20.00 hrs.
Maldebares

21.5.08

Presentación Cartel El Alternador '08


Este viernes 23 de Mayo a las 19.30 hrs., en el Fórum de la Fnac de Sevilla (Avda. de la Constitución, 8), tendrá lugar la presentación del cartel del Festival El Alternador (la otra corriente), tras la que se contará con la actuación acústica de Francisco Nixon, sumando a la presencia de Fran Fernández, guitarrista y cantante de La Costa Brava y Australian Blonde, la de Ricardo Vicente, también componente de la banda astur-zaragozana.

En la misma web y myspace del festival se puede ver más información sobre el resto de fiestas de presentación, así como de los grupos que componen el cartel.

19.5.08

Corriendo al borde del abismo

El otro día estuve hablando por teléfono con mi amigo Franco, con el que tengo menos contacto del que desearía desde que se las gana en el Reino Unido aportando algo de calidad a la (muy mejorable) comida de las islas. El motivo de la llamada no fue muy alegre (tuve que comunicarle la muerte del padre de un amigo), pero aproveché para comentar algunas cosas que se nos pasaron en su breve última escapada. De mis amigos, con él es con quién tengo una mayor afinidad personal y cultural (ya fue fundador/guitarrista de nuestro grupo de juventud), y grabándonos o intercambiándonos discos he llegado a descubrir/entender a una infinidad de bandas. De hecho, una de las cosas que echo de menos son las largas tardes lluviosas de sábado que dedicábamos a ver (acompañamiento de alcohol y tabaco incluido) por enésima vez The Last Waltz, con múltiples moviolas de por medio, haciendo tiempo para irnos a un bar.

De lo último que le estoy grabando (aprovechando que sus padres van a visitarlo en unas semanas) son discos no muy nuevos (bueno, alguno reciente le he metido) entre el que destaco uno que llevo meses reescuchando y ante el que siento gran admiración: el jodidamente bueno Doce canciones sin piedad, de 091 (foto). No sé si lo tendrá ya, ya que le pasé hace ya mucho tiempo el Último concierto y, cuando salió, el En otro tiempo, en otro lugar de Lapido. Y es que ya es de justicia que los granadinos tengan un mayor protagonismo y reconocimiento en el status musical de este país.

Cualquiera de las 12 canciones que lo componen hacen palidecer (y debería llevar a refexión) a cualquiera de los grupos y pseudo-productos que dicen hacer rock en la actualidad. Las letras de Lapido (rabiosas y poéticas a más no poder) viajan arropadas por un caparazón sonoro deudor de muchos grupos de los sesenta/setenta pero con una clara personalidad propia. Fechado en 1989, hoy día suena vivo y directo, no como tantos y tantos discos de la época. Podría destacar alguna de ellas, pero es el resultado global del mismo el que lo convierte en una auténtica y atemporal obra maestra. Ya decían ellos con una afilada ironía fatalista que nadie encuentra lo que busca, pero si lo que se quiere encontrar es un disco de rock con mayúsculas aquí tendrá un hallazgo inequívoco.

Blacanova

Dejo aquí un texto sobre el grupo sevillano Blacanova que me han publicado en Tertulia Andaluza.

Por cierto, Blacanova (junto a Aroah) abrirán el próximo día 4 de Julio la cuarta edición del Festival El Alternador.


"Son pasión lenta y corrosiva. Canciones que incendian territorios que son del corazón, que crean un malestar desconocido, un tipo de angustia que se aglutina y va a más, que se inserta dentro de ti, que te muestra enfermedad, la enfermedad interior. Claustrofobia. Música que discurre de fuera a dentro, hasta el coma emocional […]". Con estas palabras, publicadas en el extinto fanzine Malsonando, se describía en su día a unos primigenios Sr. Chinarro, y hoy no puedo sino suscribirlas una a una cuando pienso en los sevillanos Blacanova. Y es que sus canciones me transportan irremediablemente hacia las primeras referencias de Luque, así como a la oscuridad de los primeros The Cure, el ruido y atmósferas asfixiantes de Seefeel, Slowdive, Ride o My Bloody Valentine, e incluso hay atisbos de la pulsión nerviosa de Joy Division, grupos todos ellos con los que descubrí años atrás otro tipo de música alejada de la "impuesta" por las ondas, y en los que el inconfundible sonido de las cintas de cassette, al girar la rueda con sus reproducciones, se convertía en un instrumento más que se adicionaba a la tensión latente que se creaba en mi habitación. Pero más allá de referencias, Blacanova no son otro grupo cualquiera que adapta los cánones del estilo shoegazing. Son más. Mucho más. Su escucha te remite a un imaginario sonoro fácilmente visualizable. Una nebulosa envolvente que te atrapa entre guitarras que se entrelazan y expanden en un marasmo rítmico, de bases y arreglos programados, por dónde se deslizan suavemente los inquietantes (e hirientes en muchos casos) susurros de sus dos magníficas voces. Todo ello, muy valorable igualmente, sin minusvalorar la importancia de sus textos, dando vida a sombrías y turbadoras historias que encajan con perfección matemática en la personal maquinaria sónica antes apuntada. Son sensaciones al filo del abismo. Ambientes opresivos. Íntima intensidad. Afectación y dolor. Máxima introspección. Oscuridad emocional. Canciones que hieren sin posibilidad de defensa. Que irradian una perversa adicción. Y (si lo expuesto no fuera ya suficiente aval) con una ejecución en directo de altísima altura y sensibilidad. Un grupo a seguir muy de cerca. Y dejarse llevar en el intento.

17.5.08

Un inicio cualquiera

Iniciar esto implica conceder. Es soltar pensamientos o datos que en la mayoría de los casos se perderían entre variantes o anécdotas. No sólo de música, cine, literatura o televisión hablaré. De lo que venga a cuento. Sin plazos. Sin prisas. Pero con ilusión (intacta, aún).